miércoles, 21 de marzo de 2007

Santiago de Chile: una capital entre montañas y una grata sorpresa





























Hola a todos!!!

No me había olvidado de vosotros, lo que pasa es que estaba esperando encontrar algo interesante para contar y lo encontre: ORICIOS GIGANTES!!! (erizos de mar para los profanos) donde menos me lo esperaba y cuando ni siquiera contabamos cruzar los Andes, en Santiago de Chile. Es increíble poder ver en directo los frutos del Oceano Pacífico, porque no solo hay oricios gigantes sino tambien almejas, mejillones, y un sin fin de clases de marisco pero todo por cinco veces su tamaño conocido en el cantábrico. Las fotos que siguen muestras estas maravillas de la naturaleza, uhmmm. Ni que decir tiene, para los que sabeis lo que me encantan los oricios y el marisco, que ya he empezado a echar curriculum vitae a esgalla a ver si hay suerte. Además del marisco, Santiago es también tierra de buenos vinos y buena carne, aunque esta última es mejor en Argentina.

Pero bueno, no me voy a detener solo en lo culinario. Santiago de Chile es una capital de unos 5 millones de habitantes anclada entre montañas de gran altura. Es por ello, que a pesar de ser una gran ciudad siempre tienes la sensación de estar rodeado de naturaleza, de hecho en el medio de la ciudad y dividiéndola en dos se encuentra el Cerro de San Cristóbal, desde el que se puede divisar toda la capital chilena. Las vistas son increíbles. En la cima del cerro se encuentra situada una Vírgen (lo siento no soy muy católica y no me acuerdo de su nombre, ejem) rodeada de jardines en bancales, un marco incomparable para celebrar una ceremonia religiosa, que de hecho se llevan a cabo, auque no nos quedáramos a escucharla. Para subir a esta cima existe un funicular (que sino...eh, que estamos hablando de unos 5 km de subida). Desde lo alto también sale un teleférico que recorre longitudinalmente todo el cerro permitiendo ver en la bajada toda la ciudad a ambos lados. El cerro en sí, combina parte de naturaleza salvaje con numerosos jardines y piscinas, además de un zoológico.
Santiago es una ciudad tremendamente avanzada que nada tiene que envidiar a un Madrid o un Barcelona, incluso el metro es de lo mas moderno que he visto, tiene hasta un sistema de alarma que salta cuando pasas la línea amarilla que te dice que estás demasiado cerca de las vías, que menudo susto que me dio...Combina edificios muy modernos junto con numerosos edificios de estilo colonial dispersados por toda la ciudad. Parte represantativa del estilo colonial es la Plaza de Armas donde se encuentra la Catedral de la ciudad y el edificio de correos (estilo barroco frances) entre otros. Esta plaza, a pesar de estar ubicada en el centro de la ciudad, parece ser un sitio bastante peligroso en lo que a robos se refiere, por la información que los santiaginos nos dieron, y no porque esta vez lo experimentara en mis propias carnes, para variar!!!. De esta plaza sale una de las calles principales de la ciudad, la Calle Ahumada. Peatonal y donde uno se encuentra todas las tiendas además de todo tipo de espectáculos callejeros y "vendetodo" que uno se pueda imaginar. Por supuesto, hay que destacar también en esta zona el Palacio de la Moneda, el equivalente a la Casa Rosada de Buenos Aires, y el Mercado Central, donde existen los mejores puestos de pescado y marisco, y donde me encontré los oricios gigantes.

Nuria